
Según el informe de la ONUDC, la violencia sexual relacionada con los conflictos puede producirse en el contexto de la trata de personas o dar lugar a trata con fines de explotación sexual. Las poblaciones locales pueden ser objeto de trata con fines de explotación sexual por grupos armados y no armados. Los abusos sexuales contra hombres y niños también pueden aumentar en situaciones de conflicto. Así mismo los conflictos intensifican el tráfico ilícito de migrantes ya que, en esas situaciones, las personas se ven cada vez más obligadas a recurrir a traficantes a falta de otros medios seguros para huir de un conflicto y recibir protección o asilo. Quienes quieren unirse a grupos armados o terroristas también pueden contratar los servicios ilegales de un traficante que facilite su traslado a una zona de conflicto.
Es difícil estimar la prevalencia de la violencia sexual relacionada con los conflictos. Una razón importante es el subregistro, que resulta de la intimidación y estigmatización de los sobrevivientes. Las mujeres tienen más probabilidades de ser víctimas de violencia sexual y de género, así como las personas LGBTQ y las personas con discapacidad, pero también un gran número de hombres y niños son violados durante la guerra y los conflictos. Un número significativo de niños y hombres que viven en campamentos de refugiados u otros lugares de acogida lo han experimentado antes o durante la migración. Los niños que viven en centros son especialmente vulnerables.
En algunos países, las personas LGBTQ pueden ser condenadas por su orientación sexual. Algunas personas incluso podrían tener que huir de su país para buscar seguridad. El abuso sexual es perpetrado comúnmente por agentes de seguridad, miembros de la comunidad local, miembros de grupos armados u otros. En muchos casos para protegerse, las personas LGBTQ deben ocultar su orientación sexual.
Para las personas con diversas orientaciones sexuales e identidades de género, es difícil acceder a servicios seguros y de apoyo y asistencia en salud. Es posible que los y las sobrevivientes LGBTQ no busquen servicios médicos o de salud mental debido al miedo, la falta de protección o la percepción de que no hay ayuda disponible. En el peor de los casos, buscar ayuda puede provocar daños y exclusión.
Las investigaciones muestran que se han realizado esfuerzos para mejorar el conocimiento y las actitudes de los proveedores de atención médica sobre los sobrevivientes, pero aun no es suficiente y falta mucho por mejorar. La sensibilización, la concienciación y la formación de la comunidad pueden ser una estrategia para superar el estigma y la discriminación. Además, los organismos de derechos humanos hacen un esfuerzo considerable para fortalecer la protección de las personas LGBTQ. Debemos seguir destacando sus desafíos para generar un cambio positivo.
Este manual se centrará en:
Los derechos humanos como herramienta al trabajar con supervivientes. El manual está escrito e inspirado en un marco de derechos humanos. Esto significa que en nuestro trabajo psicosocial diario y en las medidas que tomamos, tenemos en cuenta que actuamos en consonancia con los derechos humanos. Esto incluye respetar la dignidad e integridad de la persona y comprender su experiencia con la violencia sexual a la luz de los derechos humanos. Podemos contribuir a que el sobreviviente comprenda que la violencia a la que estuvo expuesto viola los derechos y principios internacionales, y que los Estados y gobiernos tienen la responsabilidad de brindar asistencia, tratamiento y protección. Nuestro objetivo es que el conocimiento y la comprensión sobre los derechos humanos y lo que estos significan en la práctica, pueden darnos inspiración y herramientas para ayudar a los sobrevivientes.
Acercamiento Cultural
Fisiológicamente, los seres humanos reaccionan al peligro y al impacto de la misma manera en todas partes, independientemente de la cultura. Alguien que haya sido robado en Francia, capturado en el Congo o devastado por un tsunami en Tailandia, tendrá reacciones fisiológicas similares basadas en la fisiología y los reflejos humanos.
Bajo la influencia cultural, la forma en que las personas expresan e interpretan su comportamiento puede variar. Las reacciones corporales que muestran son comunes a la mayoría de las personas expuestas a eventos traumáticos. Al mismo tiempo, los sobrevivientes pueden comprender y expresar estas reacciones de muchas formas diferentes a la luz de sus antecedentes culturales. Nosotros, que somos ayudantes, debemos comprender y lidiar con estas interpretaciones culturales, y hacerlo teniendo en cuenta nuestra propia cultura, porque, por supuesto, también tenemos valores y suposiciones culturales.

Visibilidad: tabú y vergüenza
Después de eventos traumáticos, especialmente aquellos que son provocados por el ser humano, generalmente encontramos muchos rasgos de personalidad que se hacen visibles en el sobreviviente, que se relacionan con la culpa y la vergüenza. Te avergüenza que haya sucedido y crees que tienes la «culpa» de ello. Uno puede sentirse responsable de “no haber hecho nada”. Surgirán muchos pensamientos: “si hubiera dicho…”, “si me hubiera defendido”, “si no hubiera estado allí en este momento”, “¿por qué no me escapé?”, Etc. En algunos casos para el sobreviviente de una violación sexual, estas preguntas se vuelven muy grandes y ocupan mucho espacio. Todo esto representa un intento de encontrar una explicación de lo inexplicable, de lo sucedido, y tratar de encontrar respuestas. ¿Se podría haber evitado el resultado?
Enfoque en el ayudante
Como ayudante, todos tenemos una caja de herramientas que usamos cuando trabajamos, que hemos ganado a través de la experiencia y el conocimiento de nuestro trabajo. Tú, como ayudante, eres la herramienta más importante. A través de este manual, adquiriremos más herramientas y habilidades, y las mantendremos, para que estén disponibles en situaciones en las que las necesitemos. La intención es desarrollar herramientas y enfoques que puedan estabilizar a los sobrevivientes después de estar expuestos a eventos potencialmente traumáticos, ayudarlos a enfrentar situaciones que desencadenan recuerdos traumáticos y enseñarles posibles formas de recuperar el control de sus vidas. Nuestra esperanza es que el ayudante pueda darle al sobreviviente algunas herramientas que puedan ayudarlo, en forma de ejercicios que pueda hacer para calmarse, incluso cuando está estresado y experimentando flashbacks.
Psicoeducación
La psicoeducación como herramienta se refiere al proceso en el que usted “enseña” al sobreviviente sobre sus propias reacciones traumáticas / habituales y cómo pueden afectarlo a uno en la vida cotidiana. Creemos que es valioso ofrecer varias formas de comprender los problemas. La información presentada trata sobre qué es un trauma, por qué se experimenta como doloroso, cuáles son las reacciones típicas y conocidas a eventos traumáticos, tanto mentales como físicos, y cómo se desarrolla a menudo el trauma.
Esta información puede ayudar al sobreviviente a adquirir el conocimiento y las habilidades que le faciliten el manejo de las reacciones. El conocimiento significa que el sobreviviente comprende lo que los eventos traumáticos pueden hacerle a una persona, lo que puede esperar y ser consciente de las reacciones que puede tener. Creemos que cuanto más conocimiento y mayor comprensión tenga una persona sobre sus propias reacciones y cómo pueden afectar la vida de la persona y la vida de los demás, más control podrá tener sobre su vida. Y cuanto mejor equipado esté para afrontar y manejar diversos desafíos. La psicoeducación fortalece al superviviente y a sus allegados. También veremos qué herramientas sienten los ayudantes que tienen, qué sienten que les falta y qué les resultará útil. Lo que se enseña en este manual puede considerarse como herramientas útiles en el diálogo con el sobreviviente y con la sociedad.
Estabilización
La estabilización es un enfoque para enseñar al sobreviviente cómo lidiar con las reacciones relacionadas con el trauma. Enseñar por qué es importante estabilizar a una persona que experimenta recordatorios de trauma o se siente ansiosa y no está presente en el “aquí y ahora” puede ayudar al sobreviviente a regresar y estar presente en el ahora.
Grounding es un método de estabilización para lidiar con emociones fuertes como el miedo o los flashbacks, cuando los recuerdos «toman el control» y se experimentan como si sucedieran aquí y ahora. Los ejercicios de puesta a tierra son un enfoque terapéutico importante para lidiar con la disociación y los flashbacks, y reducir los síntomas de ansiedad y pánico, activando las experiencias sensoriales. Esto es algo que debe practicarse continuamente para automatizar la habilidad de modo que el sobreviviente pueda usarla incluso en situaciones estresantes. El propósito es ayudar al sobreviviente a salir del recuerdo traumático que revive y regresar al presente. Al usar los ejercicios, puede reorientar su conciencia y enfocar su atención en el presente, en lugar de en el pasado.
Uso de metáforas e historias
Las metáforas terapéuticas son historias o imágenes que transmiten algo que puede asombrar, inspirar o abrir nuevos pensamientos. Usamos historias y metáforas conscientemente para que el sobreviviente no tenga que poner en palabras sus propias experiencias, sino que pueda usar la historia para reconocer el trauma y las reacciones. Las metáforas pueden ser herramientas sencillas y eficaces para la enseñanza y el aprendizaje. Son más que una forma de hablar de una experiencia. Pueden describir nuestras experiencias; y pueden ser lentes a través de los cuales podemos entender el mundo y darle significado. Las metáforas y las historias pueden ayudarnos a cambiar entre conocimiento y experiencia. Una metáfora tiene un significado cargado y puede ser un mapa mental que nos muestre cómo son las cosas, cómo están conectadas o cómo se pueden entender las cosas. Una metáfora puede ayudarnos a ver lo que aún no hemos visto.
En el manual usaremos narraciones metafóricas simples para describir la experiencia y las consecuencias del abuso sexual y las reacciones al trauma. Explicamos la dirección que toma el trauma en giros genéricos en las historias; sigue siendo una historia, pero al mismo tiempo es clínicamente correcta.