Contenido
Viviendo con un trauma en el país de acogida
Un problema invisible
Personas discapacitadas y LGBTI +
La violencia sexual como arma de guerra
Más conciencia y conocimiento sobre el problema
Obtén el manual sobre violencia de género
Estimados colegas,
Acabamos de conmemorar el 19 de junio el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Sexual en los Conflictos. En estos los últimos años, ha aumentado la atención a la violencia sexual contra las mujeres en zonas de guerra y conflicto. Sin embargo, se ha prestado menos atención al hecho de que los niños y los hombres también están expuestos a la violencia sexual. Esto puede contribuir tanto a un mayor estigma como a la falta de ayuda profesional. SMDHI hemos recibido fondos para escribir un manual basado en nuestro trabajo anterior con ayudantes que trabajan con sobrevivientes de violencia de género. En esta ocasión nos centraremos en los ayudantes que trabajan niños y hombres expuestos a abusos sexuales en situaciones de guerra y conflicto o durante el proceso migratorio.
Viviendo con un trauma en el país de acogida
Muchos refugiados varones que llegan o viven en el país como refugiados, viven con un trauma que es demasiado difícil de entender para la mayoría de las personas. Algunos incluso han sufrido abusos sexuales en su viaje migratorio antes de llegar a un refugio seguro.
El abuso es un tema pesado y brutal del que a menudo puede ser difícil hablar. Pero la condición previa para que los sobrevivientes sean escuchados, vistos y ayudados es que nosotros, como sociedad, estemos conscientes del problema. ¿Cómo ocurrió el abuso y cuáles son las consecuencias tanto a corto como a largo plazo? El conocimiento sobre cómo se puede resolver el problema, debe fortalecerse y ponerse a disposición, especialmente entre quienes en su trabajo diario se encuentran con niños y hombres que podrían haber sido abusados.
Un problema invisible
El abuso sexual de hombres rompe con la imagen tradicional de un hombre que puede defenderse y tomar represalias y, por lo tanto, a menudo no se lo toma en serio. Además, la vergüenza y la culpa contribuyen a que los hombres no denuncien la violencia sexual en cautiverio, en relación con actos de guerra o en relación con la huida. Esto hace que el problema permanezca invisible y que la ayuda se vuelva difícil de buscar y encontrar.
La sociedad les debemos a los niños y hombres vulnerables que reconozcan el problema, su gravedad y se lo tomen en serio. Se debe abrir un espacio para tomar la conversación difícil. El hecho de que los hombres no pidan ayuda y de que los ayudantes rara vez se encuentren con historias de este tipo de abuso, no significa que el problema no exista.
Una investigación en áreas afectadas por conflictos en el este de la República Democrática del Congo (RDC) encontró que casi una cuarta parte de los hombres habían sufrido violencia sexual. Otra encuesta mostró que casi la mitad de los hombres que viven en una parte de Sudán afectada por el conflicto habían experimentado o presenciado abusos sexuales. En otra encuesta se informó que en Liberia, un tercio de los ex-soldados informaron que habían experimentado violencia sexual en diversos contextos.
Personas discapacitadas y LGBTI +
Además de las mujeres y las niñas, también los refugiados varones junto con los grupos vulnerables como LGBTI + y las personas con discapacidad experimentan violencia sexual en el proceso de migración. El 20% de las violaciones denunciadas al Sistema de Gestión de Información sobre Violencia de Género (GBV IMS) en el Líbano entre enero y mayo de 2016 fueron de niños y hombres. Un estudio entre refugiados y solicitantes de asilo en Marruecos muestra que los hombres fueron víctimas en 53 de 142 incidentes de violación denunciados. Una encuesta de Médicos Sin Fronteras encontró que el 17.2% de los 429 refugiados reportaron abuso sexual mientras transitaban por México huyendo de la violencia en Centroamérica eran hombres.
Necesitamos fortalecer el enfoque y el conocimiento sobre este tema. Como sociedad que recibe refugiados y otras personas con tales experiencias, es vital que tengamos un sistema de apoyo que esté preparado y disponible. Un objetivo importante es que los sobrevivientes sepan dónde pueden buscar ayuda, tanto en el sistema de servicios de salud como en los centros de recepción de asilo. El ayudante debe estar preparado y ser capaz de conocer y apoyar a la persona de la mejor manera posible, sin actitudes basadas en tabúes y vergüenza.
La violencia sexual como arma de guerra
No todos los países han tipificado como delito la violación o el abuso sexual de hombres. Al mismo tiempo, no hay duda de que todas las formas de violencia sexual en los conflictos deben considerarse una violación de los derechos humanos internacionales y, por lo tanto, considerarse como ilegales.
La violencia sexual en la guerra y los conflictos se suele denominar “armas en la guerra” y, en muchos contextos, también puede describirse como tortura o trato inhumano. La intención es humillar, controlar e intimidar a una población rompiendo los lazos sociales y la dignidad.
En muchas sociedades, puede ser tabú que los hombres hablen abiertamente sobre la tortura y, en particular, sobre el abuso sexual. Esto hace que el tema sea más doloroso y difícil de tratar. Es necesario un mayor esfuerzo para arrojar luz sobre esto en el debate público. Al mismo tiempo, siempre habrá un difícil equilibrio con respecto al tipo de información que se presenta y la posibilidad de que también se utilice indebidamente en un conflicto en curso.
Más conciencia y conocimiento sobre el problema
El primer paso es reconocer y concienciar sobre el problema. No podemos luchar contra un problema que no sabemos que existe.
La voz de todos es importante y necesaria para prevenir la violencia sexual. Al difundir más conciencia y conocimiento sobre el problema, estamos aumentando el número de aliados que pueden apoyar a los sobrevivientes y prevenir la violencia sexual. Necesitamos saber dónde, cuándo y cómo ocurre el abuso, para poder hacer algo sobre el problema y saber dónde utilizar nuestros recursos. Necesitamos conocer el problema para poder hacer algo al respecto. El cambio comienza con la conciencia.
Trabajar por una sociedad sin violencia sexual significa que nosotros, como comunidad, tenemos en cuenta las necesidades de los supervivientes más marginados e invisibles.
En 2021 MHHRI en colaboración con The Norwegian Council for Mental Health (NCMH) recibimos fondos de Dam Foundation y Norwegian Agency for Development Cooperation (Norad) elaborar un manual para los ayudantes que trabajan con niños y hombres expuestos a violencia sexual en situaciones de guerra y conflicto y compartir información relacionada con el tema.
Los manuales se pueden descargar desde el sitio web de SMDHI
Si usted está trabajando con sobrevivientes de violencia basada en género, ayuda, o participa en la capacitación de ayudantes que trabajan directamente con sobrevivientes, este es un buen recurso para usted. Hay dos manuales diferentes uno enfocado en mujeres y otro en hombres y niños, que abordan respectivamente el trabajo con mujeres, con niños y hombres que han sufrido violencia sexual. Los manuales incluyen una caja de herramientas. Los supervivientes pueden utilizarlo individualmente para regular sus propias emociones mediante ejercicios de conexión a tierra o en colaboración con un ayudante. Los ayudantes también pueden utilizar ejercicios de conexión a tierra para cuidar de sí mismos como ayudantes.
Apreciamos su retroalimentación y sus sugerencias
El boletín informativo sobre salud mental y derechos humanos es un boletín con el objetivo de proporcionar información sobre un tema determinado en el ámbito de nuestro trabajo; violaciones de derechos humanos en zonas de guerra y conflicto y salud mental. Nuestra intención es entregar un boletín informativo como una breve “insumo” donde se puede encontrar información relevante sobre un tema específico con una perspectiva de salud mental.
Agradeceríamos sus opiniones y sugerencias sobre otros temas que les gustaría ver en este boletín o si están planeando un evento sobre temas relacionados, háganoslo saber para que podamos incluir su evento en nuestro boletín.
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Les deseamos una temporada de paz con justicia y derechos humanos para todos.
Cordialmente
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Información sobre salud mental y derechos humanos
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